Las investigaciones históricas de Buses Rosarinos tienen como fuente principal los diarios históricos de la ciudad y la Hemeroteca Municipal de la Biblioteca Argentina es el lugar de visita obligada a la hora de consultarlos.
Lamentablemente hacía más de un año que este importante centro de documentación estaba cerrado. En un principio fué la pedrada del 15 de noviembre de 2006 que produjo cuantiosas roturas y posteriormente las incesantes lluvias del 2007 las que motivaron la interrupción de la atención al público.
Conocí la Hemeroteca cuando era chico ya que funcionaba en una habitación contigua a la Sala de Niños en el local de la Biblioteca Argentina en el Pje. Juan Alvarez.
Cuando se encara el proyecto de remodelación del edificio se traslada al predio que ocupara la parrilla Mini Ranch en la Estación Fluvial, una edificación que posteriormente fué demolida. Allí en 1984 me convertí en un asiduo visitante. Era un lugar amplio y cómodo pero su ubicación quedaba a trasmano del público en especial para quienes debíamos llegar en ómnibus. Esta locación iba a ser momentanea ya que el proyecto original de la Nueva Biblioteca contemplaba alojarla en uno de sus pisos algo que nunca se llevó a cabo.
Hacia 1989 aprox. se trasladó a un local situado en calle Presidente Roca al 1000 -vereda impar a pocos metros de San Luis- Su ubicación era óptima y poseía una sala de lectura más chica pero igualmente cómoda.
En 1993 el Intendente Cavallero decide la compra del inmueble que hoy ocupa en calle Santa Fe 1553, la cual fué adquirida en un valor cercano al medio millon de dolares. La casa se remodeló y tiempo después la Hemeroteca se trasladó allí. A mi juicio no es el lugar más apropiado para su funcionamiento en especial porque la Sala de Lectura es incómoda y de dimensiones reducidas.
Sin embargo en la Hemeroteca hay algo que debe destacarse porque siempre se mantuvo: la buena atención y predisposición del personal que allí trabaja.
Ojalá en un futuro no muy lejano la Hemeroteca ocupe el lugar que debe y merece tener, con instalaciones espaciosas tanto para los lectores como para las personas encargadas de manipular este valiosísimo material histórico, que de tantos traslados han sufrido deterioros.
Los horarios de atención son de lunes a viernes, de 7 a 12.30 y de 14 a 19.30, y los sábados de 9 a 14.
Foto: Una de las tantas publicidades históricas rescatadas de periódicos de diferentes décadas.
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