Estas imágenes se transforman en una postal cotidiana de la ciudad de Rosario, algo que no podemos comprender que ocurra porque son ómnibus nuevos.
Los "quedados" de Rosario Bus copan nuestras calles, en una parada, a mitad de cuadra o en una bocacalle.
En los barrios y en el centro, por calles o avenidas, cada día decenas de coches amarillos quedan parados con su capot abierto a la espera del auxilio.
Al principio podía parecer una "sensación" por la gran cantidad de unidades que esta empresa tiene circulando, pero la realidad se refleja en las quejas de los usuarios, publicaciones en redes sociales, reclamos a los medios de comunicación, etc.
Desde aquí abogamos para que todo esto tenga una pronta solución para beneficio de los pasajeros -que en algunos casos por un coche fuera de circulación deben esperar 45 minutos-.
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